






"Los filósofos desesperados", título de la exposición, están estrechamente vinculados a los primeros trabajos de Wurm, y en particular a la idea de la distorsión. La deformación física en su obra, a menudo, indica una condición emocional o psicológica. El artista da forma física a algo intangible, en particular, una conciencia psicológica, emocional o intuitiva.
En las esculturas de ropa que creó para la marca Hermès, Erwin Wurm propone un recurso visual simple, como un miembro, un volumen o una prenda de vestir, elementos recurrentes en su obra, que componen sus esculturas. El conjunto de estos elementos hablan al espectador. El aspecto interesante se encuentra en el punto de vista visual, la perspectiva de cómo compartir con el espectador. Al igual que un filósofo, Erwin Wurm se apodera de uno de los aspectos de la realidad y los procesos en una idea visual.
La obra de Erwin Wurm establece un vínculo entre el cambio de materiales y el punto de vista psicológico. También examina temas escultóricos como masa, volumen y superficie. Junto a las esculturas, la exposición incluye obras nuevas y la instalación de Crooked House Eiswerkstrasse, inspirado en casa de la infancia del artista.
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