Para su última exposición Ryan McGinley (1977) ha cambiado su enfoque, fuera de la construcción sublime del paisaje americano sin límites y se ha concentrado más bien en la creación de imágenes dentro de los límites de su estudio de Nueva York. El resultado es un sorprendente estudio del retrato en blanco y negro. Aquí vemos a McGinley no como un cronista de la aventura juvenil, sino como un motor para una catalogación casi científica de una especie de optimismo emocional.
Los retratos de McGinley son el resultado de un minucioso estudio, en la que miles de imágenes son tomadas de cada modelo. Durante el transcurso de dos años, McGinley ha fotografiado cerca de 150 personas.
En este cuerpo de trabajo, los sujetos de McGinley no se presentan de forma activa al aire libre, no se muestran dentro de un espacio localizable - un lugar donde la imagen evoca la memoria -.
De esta manera, los retratos se pueden reflejar de nuevo en el espectador, convirtiéndose en sustitutos de posibilidad emocional. Fotografías íntimas, donde su interacción con el fotógrafo parece ilimitado.
www.teamgallery.com imágenes cortesía Team Gallery New York .
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